Líneas de Referencia

Las líneas de referencia sirven para indicar, describir o enumerar un elemento (línea de cota, objeto, con-torno, etc…). Estas líneas deben terminar:

  • En un punto, si acaban en el interior del contorno del objeto
  • En una flecha, si acaban en el contorno del objeto
  • Sin punto ni flecha, si acaban en una línea de cota
Figura 14.1: Líneas de referencia

Centros de Arcos y Circunferencias y de otros elementos, Ejes y Centros de gravedad

Los centros de arcos y circunferencias, así como los centros de gravedad, deben situarse en el plano mediante dos líneas finas de trazo y punto perpendiculares (normalmente, una horizontal y otra vertical), que se cortan en trazos, y que deben sobresalir ligeramente de la figura o arista a la que aluden.

Las indicaciones de centros deben aparecer en todas las vistas, independientemente de que se hayan elimi-nado aristas ocultas o se hayan realizado simplificaciones de representación.

Si son pequeñas, estas líneas de trazo y punto se sustituyen por líneas continuas.

Figura 14.2: Centros de arcos y circunferencias

Las líneas de trazo y punto de vistas diferentes no deben unirse nunca, aunque referencien al mismo elemento.

Figura 14.3: No deben unirse las vistas

Si hay elementos cuya posición debemos marcar y están repartidos alrededor de un punto central, la orientación de las líneas de trazo y punto puede ser diferente. En el ejemplo de la izquierda, para situar los centros de los cuatro taladros circulares, lo hemos hecho mediante una circunferencia de trazo y punto y dos líneas radiales.

Figura 14.4: Elementos repartidos

Los centros de detalles, taladros o abocardamientos de tipo cuadrado o rectangular también deben indicarse siguiendo el mismo procedimiento.

Figura 14.5: Centros de detalles

Los ejes de piezas de revolución (o de las partes de ellas que lo sean, como zonas o agujeros cilíndricos) también deben indicarse mediante líneas finas de trazo y punto, que también deben sobresalir de las aristas.

Figura 14.6: Ejes de revolución

En la vista perpendicular al eje, se aplica lo visto para indicaciones de centros. Las indicaciones de ejes también deben aparecer en todas las vistas.

Figura 14.7: Ejes de revolución

Superficies Planas y Aberturas Rectangulares

Cuando quiere indicarse que una superficie paralelepipédica oblicua al papel es plana, se cruza con dos diagonales con línea fina (cruz de San Andrés). Esto es particularmente útil para indicar caras en troncos de pirámides o zonas planas de ejes.

Para indicar una abertura rectangular en una parte plana vista de frente sin tener que dibujar una vista o corte adicional, se utilizan también dos diagonales de línea fina. En la figura de la derecha, el contorno de la abertura aparece con línea de trazo y dos puntos, ya que ha quedado por delante del plano de corte (ver apartados anteriores).

Figura 14.8: Aberturas rectangulares

Eliminación de vistas innecesarias y elección de las más convenientes

Uno de los criterios principales a la hora de hacer un plano es no incluir en él vistas que aporten información repetitiva. Se deberán elegir las vistas necesarias y suficientes, y de ellas escoger las que ofrezcan información más clara y precisa.

Figura 14.9: Eliminación de vistas innecesarias

En alguna vista puede utilizarse simbología especial o leyendas que proporcionen información adicional sobre el objeto y que faciliten evitar tener que dibujar otras vistas. En las figuras siguientes se han podido obviar vistas gracias a esta simbología (en la segunda figura, el símbolo del diámetro indica que la parte derecha es cilíndrica, y las cruces de líneas finas – cruces de San Andrés – indican superficies planas; en la tercera figura, el símbolo cuadrado junto a la cota indica que el perfil es una superficie cuadrada).

Figura 14.10: Eliminación de vistas mediante simbología adicional

Partes contiguas, Posiciones límite, Contornos Primitivos…

Las piezas contiguas o adyacentes que se han hecho desaparecer de una vista y cuyo contorno muestra có-mo se une a otra principal, se dibujan con línea fina de trazo y dos puntos, teniendo siempre preferencia de vista esta pieza principal.

En los cortes, las piezas adyacentes no deben rayarse.

Figura 14.11: Piezas contiguas

Tienen igual comportamiento los detalles de las piezas que, habiendo quedado por delante de un plano de corte, queremos que aparezcan en la vista.

Figura 14.12: Piezas que han quedado por encima del plano de corte

También se representan con línea de trazo y dos puntos las posiciones límites de piezas o partes móviles, y los contornos primitivos de piezas cuya forma final se ha obtenido por medios mecánicos.

Figura 14.13: Posiciones límites de piezas móviles y contornos primitivos

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